Qué ver en Sagunto
Sagunto es uno de los municipios de la Comunidad Valenciana que tiene mucho que ofrecer a sus visitantes. A continuación os haré una lista de algunos de los puntos turísticos e interesantes que no te puedes perder de tu visita a la ciudad de Sagunto.
Para empezar os diré que si vais a visitar Valencia, una de vuestros días lo tenéis que dedicar a la ciudad de Sagunto, ya que la localidad se encuentra a tan solo media hora de Valencia.
Cómo llegar a Sagunto
La mejor manera de visitar Sagunto es hacerlo en coche porque así tendrás total libertad para poder moverte por los distintos puntos de la ciudad cómodamente.
Si llegas en coche a Sagunto, puedes hacerlo por:
*La Autopista del Mediterráneo A7 – salida sur 50 (No es de pago)
*La Autopista del Mediterráneo A7 – salida norte a la A-23 (No es de pago)
*Desde Valencia, A 21 salida A-23
*Desde Teruel A-23
Si llegas en tren a Sagunto, su estación tiene conexiones con:
*Teruel y Zaragoza
*Barcelona
*Madrid
*Cercanías Valencia y Castellón
Si vas desde Valencia en autobús, la línea 115 – Compañía AVSA
Y si llegas en avión, desde el aeropuerto de Manises hay 20 min.
Qué ver en un día en Sagunto
Sagunto tiene mucho que ofrecer a su visitante y puedes encontrar toda la información en turismo.sagunto.es. Pero si dispones de un día para ver Sagunto, te voy a enseñar a sacarle el máximo partido a la ciudad. Desde luego nos dejaremos muchos puntos por visitar, cuantos más días estés, más disfrutaras de sus encantos. Al final del artículo te doy el nombre del hotel que me hospedé por si decides pasar una noche en la ciudad.
Empezamos!!
Para comenzar la visita a Sagunto, empezaré en la Glorieta, junto a la oficina de turismo, para pedir toda la información necesaria y que se adapte a mi gusto y tiempo. Disponen de varias rutas, así que si no te apaña la que te ofrezco en este artículo, siempre puedes consultarles a ellos.
*Ojo, ¿dónde aparcar en Sagunto? No te preocupes, la mejor opción para aparcar y no tener que pagar zona azul es hacerlo al otro lado del río. Esta a unos metros de la Glorieta y allí encontraras aparcamiento de sobra.
Si eres lector/a de este blog o me sigues en Instagram, sabrás de sobra que no puedes empezar la mañana sin un buen desayuno. Te recomiendo que te tomes un trozo de tarta o una tostada en la cafetería Xocant, justo al lado del ayuntamiento y en la misma Glorieta. Un sitio muy acogedor y cuqui para desayunar o merendar.
La siguiente parada que debes hacer es visitar el forn artesanal La Melica, aquí puedes comprar el famoso pan romano, una especialidad que hacen desde hace muchos años y que no te puedes ir sin probar (solo disponible los sábados).
Continuamos la visita calle arriba para visitar la Iglesia de Santa María, pasando por la Plaza Mayor, esta última conserva una estructura porticada y fustes de columnas romanas.
Seguimos el recorrido hasta llegar al centro de interpretación – Casa dels Berenguer. Ubicado en un antiguo palacio gótico con influencias renacentistas encontrarás restos de una posible pileta para el baño ritual judío. (Visita gratuita)
A partir de ahora haremos un recorrido por el barrio judío de Sagunto, en el puedes observar las construcciones típicas y restos de su trazado original como el portal con arco de medio punto situado en la calle del Castillo, y la fachada y puerta de una casa judía con mezuzá en la Calle Castillo nº38.
Antes de continuar la visita por Sagunto, recomendamos hacer un alto en el camino para tomar fuerzas con un aperitivo temático en la Taberna de la Serp. Allí degustaras unas tapas riquísimas. Déjate aconsejar por los camareros.
Una vez hayas disfrutado del aperitivo, visitaremos uno de los platos fuertes de la ciudad de Sagunto, su teatro romano. Construido en el siglo I dC. el teatro romano es de visita obligatoria. En él puedes ver las distintas fases y épocas en las que ha sido restaurado y rehabilitado.
Seguimos cuesta arriba, prepara un buen calzado para esta ruta porque ahora nos queda la parte más empinada y la que a mi gusto es la más bonita de la ciudad. Poco nos queda para llegar al castillo, desde el cual puedes disfrutar de una fantástica panorámica a la ciudad, al campo valenciano, al Mar Mediterráneo, Valencia y las montañas colindantes.
El castillo es de un kilometro de longitud por lo que visitarlo al completo se necesita mucho tiempo. Las ruinas, plazas y restos de construcciones te hacen revivir las diferentes épocas y estilos que han vivido allí. No te lo pierdas.
Si has hecho hambre y quieres disfrutar de una experiencia única de alto nivel en el mundo gastronómico, te recomiendo que visites el Restaurante Arrels. Sus platos son obra maestra de la chef Vicky Sevilla.
Es difícil explicar con palabras la degustación de los diferentes platos que probé, pero puedo decir que fue excepcional.
Una vez finalices la comida, dirígete al coche porque nos vamos hasta el Puerto de Sagunto. Allí la primera parada la realizaremos en un lugar llamado la Gerencia.
La Gerencia es un lugar peculiar en el que puedes observar los chalets en los que vivían los altos cargos de la siderurgia. En este sitio te será fácil imaginar cómo vivían los CEO de los años 50. Un lugar abandonado en el que en su día convivió una sociedad elitista.
Seguimos el paseo hasta llegar a una plaza donde verás la iglesia de Nuestra Señora Begoña. Se hizo a imagen y semejanza de la Basílica de Begoña de Bilbao.
La penúltima visita de la ciudad de Sagunto será el alto horno. Una gran estructura metálica donde antiguamente se fundía el acero. Es uno de los pocos elementos que queda en pie, tras el cierre de la siderurgia en el año 1984.
Y por último, y solo se puede ir en coche, nos desplazaremos a visitar uno de los pocos enclaves de la costa valenciana que no fue masificado y reconstruido.
Se trata del Grau Vell, un pequeño núcleo de población junto al mar que conserva un torreón de vigilancia costera del siglo XVI y los restos arqueológicos del antiguo puerto íbero-romano. Un lugar peculiar en el que te aconsejó visitar al atardecer. Además, puedes observar las aves que se posan en el Marjal dels Moros, una pequeña albufera con un encanto indescriptible.
Espero que disfrutes de Sagunto tanto como lo hice yo.